miércoles, mayo 11, 2011

ZAPATOS DE PELICULA

Hay zapatos míticos, zapatos representativos y zapatos inolvidables. Aquí, que nos dedicamos a este complemento tan deseado, no podíamos dejar de repasar los zapatos más famosos de la historia del cine, ¿me acompañáis en el recorrido?Empecemos por el zapatito de cristal más famoso de todos los tiempos, ese que es capaz de convertir a Cenicienta en una princesa, inolvidable.Inolvidable son también los zapatos rojos en El Mago de Oz, ¿cómo si no iba a regresar la pequeña Dorothy a casa?
No se sabe cuántos pares de zapatos se crearon para rodar la película, pero cinco han llegado hasta nuestros días (un par fue robado en el 2005 y no fui yo y otro fue vendido en subasta en 1988 ¡por 165.000$!)Zapatos que han dado que hablar: por ejemplo esas Converse moradas que aparecen camufladas entre los escarpines (diseñados por Blahnik) de Maria Antonieta en la película de Sofia Coppola.Hablando de zapatos famosos no nos podíamos olvidar de “los Manolos” mundialmente famosos gracias, en parte, a Carrie y a Sexo en Nueva York.¿Y Pretty Woman?, ¿qué hubiera sido de Vivian Ward sin esas botas extra altas?Míticos son también los zapatos que Roger Vivier diseñó para Catherine Deneuve en Belle de Jour.Mucho más recientes son estas zapatillas de ballet. Su dueña, Natalie Portman en Black Swan.Alvodóvar, Tacones lejanos y este cartel que ha hecho historia (hace poco el mismo Lagerfeld diseñó para Chanel unos zapatos con una pistola a modo de tacón, como los del cartel).Y para terminar, otro cartel, ¿recordáis a qué película pertenece este zapato con un tridente a modo de tacón?
No están todos los que son, pero sí son todos los que están, ¿se os ocurre alguno más que añadir? ¿Cuál es vuestro zapato de película preferido?















Los bocetos de Manolo Blahnik

Si hay algo que me apasiona más que los zapatos, son los dibujos de zapatos vale, soy monotemática. Creo que un día terminaré por empapelar las paredes de mi casa con bocetos de tacones imposibles.




Y si hablamos de ilustraciones, mis preferidas sin duda son las de Manolo Blahnik. Sus bocetos, característicos e inconfundibles, nos muestran zapatos estilizados hasta lo imposible. ¿Lo mejor de todo?, ver como el dibujo fantástico se traduce en un zapato real, tan deseable (o más) que el esbozo.